El último libro que abandoné sin terminar estaba plagado de amenazas de posibles catástrofes y mutaciones encadenadas. Venía escrito en varios idiomas, junto con la garantía de mi nueva lavadora automática.
Obtuvo una mención del Jurado, Aníbal García Arregui, en el Taller Marina de Ficticia.
Tema del mes: miedo a la tecnología.
Perfectamente genial
ResponderEliminarDespués si hay una avería y llamas a los tecnicos, surge un problema idiomático más. Intentas hacerles entender qué ha pasado, pero como no sabes las palabras adecuadas, te sientes extranjero en tu propia casa.
Suele arreglarse con dinero, idioma universal
Enhorabuena,Mónica, siempre en el podio. Muy divertido esta mini, hubiera venido bien para la convocatoria de relatos antes del fin del mundo este apocalíptico manual de instrucciones.
ResponderEliminarUn beso.